Michigan salió de las elecciones del martes con la Cámara de Representantes dividida equitativamente entre republicanos y demócratas, en otra señal más de cuán estrechamente dividido se ha vuelto el estado de Michigan. El cambio será al menos temporal después de que los miembros de la Cámara de Representantes fueran elegidos para otros cargos y tuvieran que renunciar a sus cargos en las legislaturas.

Los demócratas de Michigan, que han controlado la oficina del gobernador y cuentan con escasas mayorías en ambas cámaras de la Legislatura, perderán su control total después de que dos representantes estatales ganaran las elecciones a la alcaldía.

Los demócratas han podido impulsar una serie de leyes clave en Michigan desde que cambiaron ambas cámaras de la Legislatura mientras conservaban la oficina del gobernador en las elecciones intermedias del año pasado, lo que les dio el control total por primera vez en 40 años.

Dos representantes estatales demócratas, Lori Stone y Kevin Coleman, ganaron las elecciones a la alcaldía el martes en sus propios distritos en los suburbios de Detroit. Las victorias eliminarán la mayoría de dos escaños demócrata en la Cámara estatal y colocarán a la cámara en un punto muerto de 54-54 hasta que se puedan celebrar elecciones especiales para los escaños. Los demócratas seguirán controlando la agenda, pero ya no tendrán ventaja en el voto.

Aún no está claro cuándo se llevarán a cabo elecciones especiales en los dos distritos, cada uno de los cuales favorece en gran medida a los demócratas, pero se espera que sean al menos varios meses. El gobernador (en este caso, la gobernadora demócrata de Michigan, Gretchen Whitmer), puede convocar elecciones especiales en el distrito del representante cuando un escaño queda vacante, o puede ordenar que la vacante se cubra en las próximas elecciones generales, de acuerdo con la ley de Michigan.

Toda la Cámara de Representantes de Michigan será elegida en las elecciones generales de noviembre del próximo año.

Coleman ganó su carrera por la alcaldía en Westland, mientras que Stone ganó en Warren. Se espera que cada uno de ellos tome juramento a finales de este mes, después de que se certifiquen las elecciones, según funcionarios locales.

Los demócratas sabían que la pérdida del control total era una posibilidad y se espera que intenten aprobar una serie de proyectos de ley esta semana antes de que Stone y Coleman presten juramento como alcaldes.

Impulsados por sus victorias de mitad de período, los demócratas de Michigan aprobaron este año un paquete de seguridad para las armas, ampliaron los derechos de voto, comidas gratis para todos los estudiantes y aumentaron las protecciones para el derecho al aborto y las personas LGTBQ+ . El estado también se convirtió en el primero en casi 60 años en derogar una ley que restringía los sindicatos conocida como “derecho al trabajo” y que fue aprobada hace más de una década por una Legislatura controlada por los republicanos.

Victorias en elecciones locales alterarán el control de los demócratas de Michigan