WASHINGTON — El gobierno del presidente Donald Trump pidió el viernes a la Corte Suprema federal que autorice el despliegue de tropas de la Guardia Nacional en el área metropolitana de Chicago, intensificando el enfrentamiento con los gobernadores demócratas por el uso del ejército dentro del país.

La solicitud de emergencia se presentó luego de que una jueza federal bloqueara, por al menos dos semanas, el envío de efectivos de la Guardia Nacional de Illinois y Texas para colaborar en la aplicación de la ley de inmigración. Un tribunal de apelaciones se negó a suspender esa orden, lo que llevó al gobierno a acudir al máximo tribunal.

La jueza de distrito April Perry determinó que no existe evidencia sustancial de un “peligro de rebelión” en Illinois que justifique el despliegue militar, como argumentaba la administración. Según su fallo, el presidente no puede recurrir al uso de la Guardia Nacional para operaciones migratorias sin una amenaza real a la seguridad interna.

Desde que asumió el cargo en enero, Trump ha obtenido varias victorias en apelaciones de emergencia ante una Corte Suprema dominada por magistrados conservadores. Entre ellas, la autorización para prohibir la participación de personas transgénero en el ejército, recortar fondos aprobados por el Congreso y actuar con mayor libertad contra inmigrantes y agencias independientes.

El procurador general D. John Sauer, principal abogado del gobierno ante el alto tribunal, instó a los jueces a intervenir de inmediato. En su escrito, afirmó que la orden de la jueza Perry “afecta la autoridad del presidente y pone innecesariamente en peligro al personal y la propiedad federal”.

Mientras tanto, la tensión aumentó en Chicago. Once personas fueron arrestadas el viernes durante una protesta frente a una instalación del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en Broadview, un suburbio al oeste de la ciudad. La policía local había delimitado “zonas de protesta” y advirtió a los manifestantes que permanecieran dentro de ellas.

En las últimas semanas, esa instalación del ICE ha sido escenario de manifestaciones cada vez más confrontativas. Agentes federales han usado gases lacrimógenos y otras sustancias químicas para dispersar a manifestantes y periodistas, en medio de crecientes denuncias por uso excesivo de la fuerza y violaciones a la libertad de prensa.

La decisión de la Corte Suprema podría definir hasta qué punto el presidente puede emplear fuerzas estatales en tareas migratorias dentro del país, un tema que ha generado tensiones políticas y legales en todo Estados Unidos.

*Con información de AP.

Trump pide a la Corte Suprema autorizar el envío de la Guardia Nacional a Chicago