Se están considerando medidas de seguridad
Por Edith Reyes
GRAND RAPIDS, MICHIGAN (EVH) - Miembros del Distrito de Escuelas Públicas de Grand Rapids (GRPS), el Departamento de Policía de Grand Rapids, el Fiscal del Condado de Kent, entre otros líderes comunitarios, se reunieron el miércoles por la tarde después de que encontraron a un niño con un arma de fuego en la Escuela Primaria César E Chávez ubicada en 1205 Cesar E Chávez Ave SW.
Tanto el Departamento de Policía de Grand Rapids como GRPS, están investigando cómo el niño de 7 años pudo traer un arma de fuego descargada a la escuela. Durante la conferencia de prensa, se dijo que saben que vino de casa y que están hablando con los padres.
El incidente ocurrió a las 9:50 am, cuando un estudiante le dijo al personal que el niño tenía un arma. Los maestros y el personal pudieron registrar la mochila del estudiante y encontraron el arma descargada. No se encontraron municiones. También se afirmó que no hubo amenazas a nadie y que el niño fue retirado de la escuela, lo que permitió que continuaran las clases.
“Quiero reiterar que un niño trajo un arma”, dijo Larry Johnson, jefe de personal y director ejecutivo de seguridad pública de GRPS. “Pero ese niño trajo esa arma de una casa, cuando los adultos deberían haber sido responsables de asegurar esa arma”.
El jefe de GRPD, Eric Winstrom, dijo que el niño es una víctima ya que el arma fue traída de su casa. También afirmó la importancia de contar con proyectos de ley de control de armas. La gobernadora Gretchen Whitmer firmó un proyecto de ley de almacenamiento más seguro hace unas tres semanas, donde aquellos que poseen armas deben guardarlas bajo llave.
“No hay motivo por el que los padres y adultos de Grand Rapids y nuestra comunidad no deban estar haciendo eso en este momento. No dejes que estos niños se apoderen de estas armas”, dijo Winstrom. “Si ese acto público estuviera vigente hoy, sería un delito menor de al menos 93 días”.
El jefe dijo que se está llevando a cabo una investigación y que todos los hechos serán revisados con el fiscal del condado de Kent, Chris Becker, para determinar si se presentarán cargos a los padres.
Esta es la tercera vez que GRPS ha tenido que sacar a un estudiante encontrado con un arma de fuego. Los primeros dos ocurrieron en Burton Middle en este año académico.
“Estoy frustrada porque esta no es la primera vez de lo que va del año que esto sucede en nuestro distrito”, dijo Leadriane Roby, superintendente de GRPS. “Ha sucedido tres veces diferentes. Nuestro personal ha encontrado armas en nuestras escuelas, en tres ocasiones separadas. Me preocupa aún más que estos decomisos estén involucrando a jóvenes de secundaria y primaria”.
Cuando se le preguntó qué medidas de seguridad se tomarán, la Dra. Roby dijo que lo están considerando.
“Los detectores de metales son un elemento disuasorio, pero tampoco queremos dar una falsa sensación de que esa será la única herramienta”, dijo. “Recuerden, este es un lugar de educación, no queremos que nuestras escuelas se conviertan en prisiones”.
Ya se han instalado detectores de metales en algunas escuelas. El relacionarse con los alumnos de una mejor manera, es lo que ella cree que sería la mejor defensa.
“El joven estudiante que compartió con su maestro que pensaba que su compañero de clase tenía un arma en su mochila, significa que confía en ese adulto para compartir esta información. Y esa es nuestra mejor forma de defensa. Nuestro próximo nivel es simplemente tener conversaciones constantes con nuestros jóvenes de que las armas no son juguetes”, dijo la Dra. Roby.
Solo unos días antes de que ocurriera este incidente, la Dra. Roby junto con otros 33 superintendentes del oeste de Michigan subscribieron una declaración de preocupación por la cantidad de incidentes violentos que involucran a sus estudiantes.
“Como superintendentes, estamos profundamente preocupados por el dramático aumento de muertes relacionadas con armas entre nuestros jóvenes. La seguridad y el bienestar de nuestros estudiantes es nuestra máxima prioridad, y tenemos la obligación de prevenir la trágica y sin sentido, pérdida de vidas”, dice parte del comunicado. “Reconocemos que la violencia armada es un tema complejo. No hay soluciones fáciles. Sin embargo, si queremos revertir estas tendencias, es esencial que tengamos conversaciones significativas sobre el control de armas, la salud mental y el aprendizaje social y emocional. Solo trabajando juntos podemos crear entornos seguros y de apoyo para nuestros niños. Nuestros hijos no se merecen menos.”
La declaración proporcionó datos de la Universidad John Hopkins, que afirmó que las armas de fuego son la principal causa de muerte entre los niños menores de 18 años en los Estados Unidos. Cada año, 19,000 niños y adolescentes son asesinados a tiros o heridos, y aproximadamente 3 millones están expuestos a la violencia armada, afirmaron los datos de la universidad.
Pero los superintendentes no son los únicos preocupados por estos incidentes, también lo son los padres y los miembros de la comunidad.
Mientras El Vocero Hispano TV cubría la conferencia de prensa, llegaron muchos comentarios de padres que afirmaron que no entienden cómo está sucediendo esto en las escuelas de su vecindario.
Uno de nuestros seguidores dijo que, “Deberían de meter presos a los padres. También ellos son los responsables de sus hijos que traen pistolas a las escuela”. Otro añadió, “Ya no deberían permitir mochilas en las escuelas, talvez con eso se calme un poco más. En otros estados, eso fue lo que hicieron”.
Otros padres de familia, fueron más extremos con sus comentarios, “Creo que voy a poner a estudiar a mis hijos en casa porque yo no puedo confiar en una escuela que no tiene la capacidad de tener seguros a los estudiantes, y como madre me dolería una mala noticia y no digo que sean incompetentes, sino que es imposible ya ahorita en tiempos estos”, comentó una mujer.
Mientras algunos ruegan a las escuelas que instalen más medidas de seguridad, otros creen que el problema no son las escuelas sino los hogares.
“No son las escuelas el problema. Todo empieza en casa… si tienen algún arma, pónganla en lugares seguros... a veces los niños son curiosos pero la educación se empieza en casa y ojalá les caiga todo el peso de la ley a los padres responsables que no cuidan a sus hijos de lo que llevan a la escuela”, comentó otra mujer.
En nombre de todos los departamentos y líderes comunitarios que estuvieron presentes en la conferencia de prensa el miércoles, se alienta y se les pide a los padres que guarden sus armas bajo llave, conversen con sus hijos y revisen las mochilas de los estudiantes antes de salir de casa.
Si alguien ve o escucha algo sospechoso, se le anima a usar el programa estatal de seguridad estudiantil llamado OK2SAY, donde se pueden enviar mensajes de texto anónimos para informar a las autoridades sobre problemas de seguridad dentro o fuera de la escuela.