El Vocero Hispano Logo

Ultimas Noticias

Editorial 1340

25 mayo 2023

Hace doce meses de la matanza de Uvalde

El 24 de mayo del 2022 un joven de 18 años entró a la escuela armado de un rifle AR-15 y mató 21 personas, 19 de ellas niños.

Los padres de las víctimas demandaron a la ciudad de Uvalde, al distrito escolar y a los fabricantes de armas, por la muerte de sus hijos. El joven perturbado que se convirtió en asesino, Salvador Rolando Ramos, entró armado a la escuela sin que nadie lo detuviera, había comprado el arma días antes sin ningún tipo de inconveniente y probablemente supo de esta, de la AR-15, a través de una publicidad de su fabricante.

De acuerdo a un reportaje de la Associatte Press, las demandas contra el distrito escolar y la ciudad han progresado, pero las entabladas contra los fabricantes de armas no, porque estas están protegidas por la “Ley de Protección del Comercio de Armas de Fuego (Protection of Lawful Commerce in Arms Act)”, aprobada en el 2005 por el congreso que para esa fecha estaba bajo el control del Partido Republicano en el Senado y en la Cámara de Representantes.  También la Casa Blanca estaba bajo el gobierno del también republicano George W. Bush.

La ley también protege a los distribuidores y comercializadores incluyendo a los que venden las armas en las llamadas ferias.

Cinco años antes de que el presidente Bush firmara la ley, se había producido la matanza de la escuela Columbine en Colorado, en la que dos estudiantes con armas de asalto y varios magazines de balas mataron a 12 estudiantes y un profesor.  El mismo año, apenas siete meses antes, un hombre entró armado a un templo de una iglesia bautista en Brookfield, Wisconsin y mató a siete personas.

Dos años después de firmada la ley se produjo la matanza de Virginia Tech, una de las más grandes de la historia.  Un hombre armado entró a un recinto de la Universidad Estatal de Virginia y mató a 32 personas.

Según el reportaje de AP, algunos de los padres que perdieron la demanda contra los fabricantes de armas en la matanza de Ubalde, ahora tienen que pagar más de 200 mil dólares a los fabricantes de armas para cubrir los gastos que estos hicieron en abogados para defenderse en la corte.  Es decir, que además de haber perdido a sus hijos ahora tienen una deuda difícil de pagar.  Probablemente puedan hacerlo si les sobrara el dinero de la demanda contra la ciudad y el distrito escolar.  Lo que quiere decir, que en las matanzas masivas todo el mundo pierde menos los que fabrican y comercializan las armas letales con las que se cometieron los crímenes.

A un año de la matanza de Ubalde y a muchos otros de tantas masacres que se producen en el país, no hay en el horizonte una solución.  Porque el crimen nunca se detendrá mientras los criminales continúan impunes y las más altas instancias del gobierno los protejan.

Resulta difícil sentir lo que sienten un padre y una madre que han perdido a su hijo en edad tierna de manera horrenda, solo de pensarlo perturba.  Y más aún el horror que vivieron esas criaturas antes de perder la vida.

Pero eso no les preocupa a los legisladores republicanos que defienden a los fabricantes de armas, porque para ellos lo más importante es mantener su puesto en el Capitolio. Un puesto costeado por la sangre de miles de inocentes.