Por Karla Bahm

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GRAND RAPIDS, MICHIGAN (EVH) - El caso que ha conmocionado a la comunidad de Grand Rapids continúa su curso judicial. La audiencia para determinar si Brandon Ortiz-Vite, de 25 años, acusado del asesinato de Ruby García, debe ser juzgado, fue pospuesta por algunas semanas más.

Ortiz-Vite compareció en persona ante el tribunal por primera vez el martes 09 de abril, alrededor de las 9:35 a.m. La jueza de distrito de Grand Rapids, Angela T. Ross, acordó retrasar su audiencia preliminar para dar tiempo a su abogado para revisar las pruebas presentadas en su contra. El sospechoso se encuentra actualmente detenido en la cárcel del condado de Kent, donde enfrenta cinco cargos graves. Entre estos cargos se incluyen el asesinato de Ruby y robo de auto.

Según registros judiciales, Ortiz-Vite confesó haber utilizado un arma obtenida de manera ilegal para quitarle la vida a Ruby, a quien identificó como su novia, el pasado 22 de marzo. Sin embargo, Mavi García, hermana de Ruby, desmintió esta relación en declaraciones a los medios, señalando que Ruby conocía a Ortiz-Vite desde hacía aproximadamente un año, pero que no eran pareja. Tanto Mavi como su padre estuvieron presentes en la corte el día de la comparecencia de Ortiz-Vite, pero optaron por no hacer comentarios.

Después de que saliera a la luz el lamentable asesinato de Ruby, en una entrevista exclusiva para El Vocero Hispano, Mavi García compartió detalles íntimos sobre su dolor y angustia, así como sus esperanzas de justicia para Ruby, mientras se aferra a los recuerdos amorosos de su única hermana. “Nos enteramos en la madrugada, alrededor de las 3 de la mañana del sábado, recibimos una llamada que habían encontrado su cuerpo en la carretera US 131”, relató Mavi, reflejando el profundo dolor que ella y su familia están experimentando.

“Sentimos mucho coraje y tristeza al mismo tiempo”, continuó Mavi. “La verdad no entendemos las razones y los motivos de por qué el sospechoso nos quitó a mi hermana. Es un dolor muy fuerte e inexplicable, no se lo deseo a nadie y de verdad no tengo muchas palabras para expresar cómo me siento, solo sé que es un dolor muy feo”.

Según documentos oficiales de la corte, Ortiz-Vite llamó al 911 para entregarse dos días después del asesinato en una iglesia del condado de Allegan, después de pasar la noche allí y asistir al servicio del Domingo de Ramos.

Ortiz-Vite, quien llegó indocumentado a Estados Unidos siendo niño, fue beneficiario del programa DACA (Acción Diferida para los Llegados en la Infancia), pero permitió que su estatus expirara en marzo del 2019. Se graduó en el 2017 de la escuela secundaria de Wyoming y había pasado 30 días en la cárcel por irrumpir en la casa de una exnovia en el 2018. Además, fue deportado en septiembre del 2020 tras ser arrestado por conducir ebrio en Grand Rapids. Las autoridades ignoran cuándo regresó a Estados Unidos nuevamente indocumentado.

La vida de Ruby fue truncada por la violencia a sus 25 años, dejando un vacío imposible de llenar en el corazón de su familia y seres queridos. Ruby, una joven llena de vida y con un futuro lleno de planes y sueños, es recordada por su familia y amigos como una persona generosa y compasiva. “Tenía muchos planes, le gustaba viajar y estar entre familia. Teníamos muchos planes para este año y desafortunadamente ya no se podrán hacer por las acciones del sospechoso”, dijo Mavi. “Ruby era una gran mujer, muy inteligente y con un gran sentido del humor. Era la mejor persona del mundo... No puedo explicar la manera de cómo estaba dispuesta a ayudar a la gente y dar mucho por ellos. Mi hermana era un amor. La persona más noble del mundo”, afirmó Mavi.

Con el peso del dolor sobre sus hombros, la familia García busca respuestas y se aferra a la esperanza de que se haga justicia en nombre de Ruby. “Esperamos que se le haga justicia como debe ser. Ojalá al sospechoso le den cadena perpetua sin libertad condicional. No podrán regresar a mi hermana para que ella disfrute de la vida, pero espero que su asesino no vuelva a ver las calles de este mundo otra vez”, sentenció Mavi.

La comunidad de Grand Rapids sigue conmocionada por este trágico suceso y se une en apoyo a la familia García, mientras esperan que el sistema legal haga honor a la memoria de Ruby y se haga justicia. Con el recuerdo de Ruby presente en sus corazones, la familia García enfrenta el proceso judicial con determinación y esperanza, buscando encontrar consuelo en el amor y el apoyo mutuo en estos momentos de profunda aflicción.

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